Lucía con la abuela

Mi madre era una mujer recia, vasca, de armas tomar. Capaz de enfrentarse toda su vida a lo que se le pusiera -y se le ha puesto mucho- por delante. Pero todo lo ha superado, de todo ha salido. Con sus cicatrices, como es normal, pero sin perder un ápice de ilusión por la vida. Ilusión que en la última etapa de su vida se ha concretado en poder disfrutar de sus cuatro nietas. Solo tuvo hijos varones, y siempre quiso haber tenido una hija pero, en vez de eso, se ha visto compensada con sus cuatro nietas. En la foto está con Lucía, la más pequeña, este verano, cuando aún no había cumplido su primer año.
Mi madre murió el pasado día 27, serena, apagándose, acompañada, después de 79 años de peregrinaje.
Ha cumplido su esperanza de reencontrarse con mi padre desde que hace treinta y ocho años y trece días dejaron tanta conversación pendiente y tantos proyectos truncados.
Ahora andarán poniéndose al día, y ella le estará diciendo cómo ha vivido él en el corazón de sus nietas aún sin haberle conocido, y seguro que él le estará diciendo cómo ella seguirá viva en sus hijos y sus nietas de la misma manera.
Aquí abajo seguiremos el camino emprendido por ella, de otro modo, con otra cicatriz, pero de la misma manera que nos enseñó: sabiendo que esto es solo hasta que nos volvamos a encontrar, aunque a veces se haga largo.

Comentarios

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  2. Hola Fer:
    ¿Cómo lo llevas? No son momentos fáciles y no es sencillo acostumbrarse a la ausencia de un ser tan querido como una madre.
    A pesar de la fe y el convencimiento de que la verdadera vida es la que ahora ella está disfrutando, el lado humano está ahí y la separación es dura.
    Los que ya hemos pasado por esto nos damos cuenta de que el cordón umbilical, que dicen que se corta cuando nacemos, en realidad permanece siempre incluso hasta cuando nuestra progenitora se va, quizá por eso a los pocos meses de morir mi madre experimenté una extraña pero agradable tranquilidad.
    Tu fuerza personal y tu fe son lo más importante para estos momentos, y por supuesto tu familia y amigos, ahí nos tienes.
    Besos.

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