50 años



Ayer cumplimos medio siglo, como si nada, pese a los servicios sanitarios de urgencia de mi ciudad que se habían empeñado torpemente en impedirlo. El acontecimiento se rubricó con una fiesta sorpresa organizada por los amigos más cercanos, los de siempre, sin que yo me hubiese percatado de nada durante este tiempo.

Dos motivos para la bendición: los años, o sea, la vida; y las personas con las que la hemos compartido y lo seguiremos haciendo. Y ambos motivos, igualmente para la reflexión: ¿qué haremos los próximos cincuenta?

Comentarios

  1. OTROS CINCUENTA AÑOS.... ¿NO TE PARECEN MUCHOS? ESPEREMOS QUE DIOS NOS REGALE ALGUNOS AÑITOS MÁS Y QUE TENGAMOS POR LO MENOS LA MISMA SALUD QUE AHORA. UN ABRAZO

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

No tengo fuerzas para rendirme

Feliz año nuevo, en pijama