Vivir y creer. Segundo domingo de Pascua

Comentarios

  1. Estimado padre Fernando:

    Un amigo común (de Cáritas Diocesana) me ha recomendado leer su blog, el cual me parece todo un regalo.

    En un mundo tan proclive al juicio gratuito y a las banalidades, llorar la muerte de los que pierden sus vidas en el ejercicio profesional me parece encomiable. ¡Felicidades!

    Seguiré día a día sus sabias reflexiones. Dios le bendiga.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

No tengo fuerzas para rendirme

Feliz año nuevo, en pijama