No nos gusta hablar de conversión. Casi instintivamente pensamos en algo triste, penoso, muy unido a la penitencia, la mortificación y el ascetismo. Un esfuerzo casi imposible para el que no nos sentimos ya con humor ni con fuerzas. Sin embargo, si nos detenemos ante el mensaje de Jesús, escuchamos, antes que nada, una llamada alentadora para cambiar nuestro corazón y aprender a vivir de una manera más humana, porque Dios está cerca y quiere sanar nuestra vida. La conversión de la que habla Jesús no es algo forzado. Es un cambio que va creciendo en nosotros a medida que vamos cayendo en la cuenta de que Dios es alguien que quiere hacer nuestra vida más humana y feliz. Porque convertirse no es, antes que nada, intentar hacerlo todo mejor, sino sabernos encontrar por ese Dios que nos quiere mejores y más humanos. No se trata solo de “hacerse buena persona”, sino de volver a aquel que es bueno con nosotros. Por eso, la conversión no es algo triste, sino el descubrimiento de la verdadera a...
Lo mejor de la canción los punteos de guitarra y la intencionalidad de no querer olvidar. ¡Feliz día Pentecostés!
ResponderEliminaruna sutil forma de decir que no te ha gustado, jeje
EliminarCreo que andas muy suspicaz últimamente; espero que el Espíritu Santo le ponga remedio a esas sospechas. Jajaja.
Eliminares que como la sosa no ha dicho nada, digo, a ver si está extendiendo el virus antimusical, porque me ha dicho un pajarito que se vió el festival de eurovisión, pobre, creyendo que era música
Eliminar¿Acaso piensas que "la sosa" tiene unas orejas tan atrofiadas como para tragarse el festival, y unas entendederas tan estrechas como para contabilizar puntos? ¿Será por eso lo del insomnio?
EliminarNo sé lo que tendrá, pero verlo lo ha visto
EliminarPuntualizar que sólo vi hasta que España actuó, que prácticamente ninguna de las canciones que escuché me gustó (creo que escuché 7) y España me pareció la peor y más insegura de todas...
EliminarY como ayer no me gustó... pues otra vez Fito... y eso del gusto musical... Fernando, cariño, deberías ir al médico que se te está atrofiando...