Orar en el mundo obrero, IV Domingo de Pascua.

Nuestro mundo cada vez cuenta con más realidades que necesitan del pastoreo, del cuidado, de la ternura, de hombres y mujeres capaces de “primerear” la divina presencia humanada del Buen Pastor. Necesita puentes tendidos, en lugar de muros. Necesita pastores de lo social. Como nos sugiere el ¡Tú! de abril mayo, 

Lamentamos la muerte de muchas personas por una enfermedad para la que no tenemos tratamiento, y muchas de ellas que, por su vulnerabilidad, deberían ser objeto de especial atención y cuidado.

Vemos destapadas las vergüenzas de un sistema que había desmantelado los sistemas de salud y de cuidados públicos y los recursos del Estado han tenido que acudir con urgencia a tapar sus agujeros.

Sufrimos el empobrecimiento de muchas personas que ya malvivían en la precariedad de sus trabajos y han quedado a merced de subsidios que palían escasamente sus necesidades. Otras, aún los esperan, pues permanecen enrocados en un laberinto burocrático. O aún peor, quedan sin trabajo y viven en la frontera de la exclusión social.

Saludamos las medidas políticas que pretenden paliar la suerte de muchas personas que sufren estas consecuencias, pero nos parecen parches pues adolecen de una voluntad clara de quebrar una economía de la iniquidad.

Constatamos que vivimos de espaldas a la Naturaleza. Y el consumo desmesurado y un sistema depredador destruyen el equilibrio de los ecosistemas a los que pertenecemos y condena a pueblos enteros a la miseria o la extinción.

Esta situación revela de manera clara en sus consecuencias cuáles son los amargos frutos de un sistema que está arraigado en el afán de lucro y el individualismo.

Se evidencia la dependencia que tenemos como familia humana de unas personas para con otras, del cuidado del que estamos necesitados.

Necesitamos una política con una orientación hacia el bien de todos, pero en especial hacia quienes son víctimas de la injusticia o tienen mayor debilidad.

Necesitamos pastorearnos mutuamente. Por ello oramos en el mundo obrero


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